Los diamantes son para siempre

Durante la Cena de Premiación del WBC en Uzbekistán el lunes por la noche, en el hermoso Gran Salón de Banquetes Osiyo en Tashkent, se escuchó la pertinente pregunta enjoyada y humorística del Gran Campeón Julio César Chávez, mientras se le entregaba un magnífico Cinturón de Eternidad Verde y Dorado, en reconocimiento a su legendaria carrera. …”¿Son reales estos diamantes?

Sin duda, la decoración, especialmente los candelabros, tuvieron un brillo especial y un brillo impecable en un evento espectacular organizado por Gafur Rahimov, primer vicepresidente de la Federación de Boxeo Profesional del condado.

El baile del maratón del tambor fue un placer para la vista, al igual que el baile tradicional. Julio anunció al Peleador del Año del WBC, Saúl Canelo Alvarez, quien se comunicó vía telefónica uniendose a las festividades.

Evander Holyfield y Oleksandr Usyk ganaron placas especialmente grabadas al igual que el Campeón de la Esperanza Billy Dib.

La música y el canto crecieron en ritmo e intensidad, de modo que nadie prestó mucha atención cuando surgió la canción Hit the Road Jack.

El único que tuvo ganancias escasas y una tarifa exigua fue el presidente del WBC, Mauricio Sulaimán, quien se vio apurado en el trabajo de competir y otorgar premios. Todos los demás fueron mimados.

Como observó una vez Oscar Wilde: “Demasiado de algo bueno… ¡es delicioso!